ENTRE REJAS

Aquella mañana todo era silencio…… al despertar y ver los barrotes no se oía nada.
Debía huir. Salir de allí. La maniobra del día anterior no había servido de nada, y había que buscar otra…….
En silencio me incorporé pero fui sorprendido y sacado de la cuna en volandas
-“Ya se ha despertado mi nene”- dijo mi madre.

Al día siguiente intentaría de nuevo escapar de la cuna e ir a por galletas.

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